El técnico barcelonista desgranó las razones de su marcha en una multitudinaria rueda de prensa, a la que también acudió la plana mayor de la directiva y buena parte de los pesos pesados del vestuario. Entre ellos, los cuatro capitanes: Xavi, Puyol, Valdés e Iniesta, y también Piqué, Cesc, Pedro y Sergio Busquets.
Guardiola explicó que su decisión de irse se gestó en otoño del año pasado, y consideró "un error" haberse demorado tanto en hacerla pública: "Lamento la incertidumbre que he generado sobre mi continuidad".
"En octubre y a principios de diciembre le comuniqué al presidente que el final de mi etapa estaba muy presente. Pero no lo podía hacer público, ni decírselo a los jugadores. Hubiera sido un lío. La decisión estaba tomada desde hace tiempo. Por eso se ha hecho tan largo e incómodo", admitió.
"Cuatro años en el Barça son una eternidad"
El técnico insistió en que, desde que llegó al banquillo, su idea era cubrir un ciclo corto y no eternizarse en el cargo. De ahí que, con cuatro años, haya tenido suficiente, incluso más de lo que esperó al principio: "No hice caso a la gente que me dijo que estuviera sólo dos años", dijo. "Entreno en mi casa, y eso tiene un plus muy grande. Estas cosas se han de hacer a corto plazo, y cuatro años son una eternidad en el Barça", dijo.
Guardiola destacó que, debido al esfuerzo y la dedicación puesta en todo este período, ya no se sentía con fuerzas para continuar: "El tiempo lo desgasta todo, y yo me he desgastado", reconoció.
"Quien venga dará cosas que ya no puedo dar"
"El próximo que venga dará cosas que yo no puedo dar. La exigencia es muy alta, y hay que tener fuerza y energía para contagiar tantas cosas... Yo lo tengo que recuperar, descansando, alejándome de todo esto, porque nos hubiéramos hecho daño, o quizás no, mis jugadores y yo. Les tengo mucha estima y hemos vivido demasiadas cosas juntas para que esto temblara, no me lo perdonaría nunca. Es mi sitio privilegiado, el mejor posible, pero hago lo que me toca", explicó. Y se mostró feliz por marcharse "con la sensación del trabajo bien hecho". "Me he vaciado. Me voy en paz. Así nadie se queda herido, y te queda un recuerdo más vivo y real, que es el que me llevo, satisfecho por lo que he hecho".
"Gracias a los jugadores"
El entrenador barcelonista dio las "gracias" a sus jugadores por "todo lo que han dado". "He tenido el privilegio de trabajar con ellos. Lo he hecho con la máxima pasión. Les agradezco millones de jugadas y partidos que muchas veces imaginé, y que han hecho realidad. Día tras día, durante tantos años. No hay nada más valioso, es lo que me llevo. Cuando Evarist Murtra me ofreció hace cinco años entrenar al filial, di saltos de alegría. Al año siguiente, cuando me ofrecieron dirigir al primer equipo, sentí lo mismo. Pero el tiempo desgasta la ilusión. No hubiera seguido como un entrenador del Barça merece", adujo.
"De Tito podemos esperar lo mejor"
Y quien tomará su relevo una vez haya acabado esta temporada será su hasta ahora segundo, Tito Vilanova. Guardiola avaló a su sucesor, que ha sido su derecha desde que, hace cinco años, ambos se hicieron cargo del filial. "Quien venga lo hará muy bien", auguró Guardiola
"De Tito podemos esperar lo mejor. El club ha acertado de lleno. Le tengo una estima total, por todo lo que me ha ayudado, es una persona más que capacitada. Los jugadores le conocen, saben que tocará poco de lo que hay, las ideas eran conjuntas. Dará lo que siento que yo ya no podía dar", explicó.
Guardiola desveló que la decisión sobre quién debía ser su relevo fue tomada por el director del área de fútbol, Andoni Zubizarreta. Y, cuando éste le preguntó su opinión, su respuesta fue favorable.
"Le pregunté a Tito si se sentía capaz. Y le dije: 'si te sientes fuerte, tira. No lo dudes, es una oportunidad que te da el Barça, y todos los entrenadores del mundo lo desearían'. Es una decisión de Zubizarreta refrendada por el club. Yo sólo di mi opinión. Claro que está capacitado. Llevo cinco años trabajando con él, nos conocemos desde hace mucho tiempo", manifestó.
"Que yo esté un poco vacío no significa que los demás lo estén. Que yo dé un paso al lado no significa que él tenga que darlo. Si se siente capaz de sacar esto adelante, perfecto. Zubizarreta lo decidió y él acepta el reto", insistió.
"En la vida hay más cosas que el fútbol"
Guardiola no desveló qué hará una vez haya acabado esta temporada, en la que el equipo todavía puede conseguir la Copa del Rey. Su objetivo a partir de este verano será descansar, y tomarse un tiempo para reponer energías. Cuando lo haya conseguido, no descarta regresar a los banquillos: "Tarde o temprano volveré a entrenar. No sé cuándo. Ahora tengo interés por otras cosas, la vida ya me dirá dónde voy. En la vida hay más cosas que el fútbol", señaló.
"No me reuní con Abramovich"
En este sentido, el de Santpedor desmintió las especulaciones sobre su posible fichaje por el Chelsea, y negó haberse reunido con el propietario de la entidad londinsense, Roman Abramovich: "Sería una falta de respeto para el club".
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