El primer Bolívar que llegó a Venezuela fue el quinto abuelo del Libertador, don Simón de Bolívar, llamado el Viejo, quien vino con el Gobernador don Diego de Osorio, en 1589, en calidad de Secretario suyo. Había nacido en Marquina, del señorío de Vizcaya, España. Y allí fue donde se originó el apellido Bolívar, pero escrito así: Bolíbar, que quiere decir en lengua eúscara o de los vascos pradera de molino. Por eso mis antepasados tenían en su escudo una piedra de molino
Simón José Antonio de la Santísima Trinidad Bolívar y Palacios nació en Caracas el 24 de julio de 1783.
Se sabe que Bolívar tuvo muchas mujeres a lo largo de su vida, entre las cuales figuraban Güera Rodriguez a quien Bolívar conoció a los 16 años, luego de ella vino Maria Teresa Del Toro, el amor de su vida, la mujer con la que se casó y que lamentablemente murió a menos de 12 meses de su matrimonio. Fanny Du Villars, Josefina Machado, Asunción Jimenez, Luisa Crober, Isabel Soublette, Juana Pastrano, Bernardina Ibañez, Joaquina Garaicoa y Manolita Madroño fueron algunas de las mujeres que asaron por la vida del Libertador. Sin embargo fue Manuelita Saenz quien estuvo toda su vida al lado de Bolívar, dandole su amor.
Un día cuando Bolívar se encontraba en El Perú, Manuela llega a la villa donde el se hospedaba el Libertador y consigue en la cama del héroe un pendiente de diamante que no era de ella. Furiosa quería arrancarle los ojos al Libertador. Lo ataca tan salvajemente que el hombre necesita la ayuda de dos de sus edecanes para liberarlo de la enfurecida mujer. Las uñas de Manuelita dejan en el rostro de Bolívar tales marcas que este tuvo que permanecer ocho días en sus habitaciones. Alegando que tenía una fuerte gripe. En esa semana tuvo los cuidados más celosos y dedicados de Manuela.
Para muchos el mejor amigo de Bolivar fue un perro, llamado "Nevado". Click Aquí para conocer su historia.
En Roma, Bolívar no se arrodilló ante el papa Pío VII, y así, violó el exigente protocolo vaticano.
En 1810 viajó acompañado de Luis López Méndez y Andrés Bello, en misión diplomática a Londres.
Después del terremoto de Caracas en 1812 dijo: "Si se opone la naturaleza, lucharemos contra ella..."
En 1813 llegó hasta Cúcuta y recibió el grado de Brigadier de los Ejércitos de la Unión y ciudadano de la N. Granada.
En 1815 escribió la Carta de Jamaica y comenzó una intensa campaña epistolar para ganar apoyo británico.
En el mismo año, en su hamaca fina, yace asesinado el buen amigo Félix Amestay, lo habían confundido.
En el congreso de Angostura respaldó un poder ejecutivo que no respondiera al parlamento.
En la campaña de la Nueva Granada coronó la victoria de la Batalla de Boyacá, entró triunfal a Bogotá.
Decretó la unión de la Nueva Granada a su patria y nombró vicepresidente a Santander.
El 24 de junio de 1820, Bolívar venció en la llanura de Carabobo y entró en Caracas como triunfador.
Su primer antepasado llega a Caracas en 1587. Se llamaba Simón Bolívar.
La crianza de Bolívar fue confiada a Luisa de Mijares y más tarde a la negra Hipólita, a la cual quiso mucho.
Al igual que Napoleón, Bolívar tuvo una amante de nombre Josefina Machado, por ella aplazó una batalla.
Bolívar calmó su viudez en brazos de Fanny de Villar, otra de sus amantes. Sucedió en París (Francia).
En 1803, de regreso a la Nueva Granada, inició amorios con Anita Lemoit, natural de Salamina.
En 1814, el Arzobispado de Bogotá excomulga a Bolívar. Pensaron que iba a saquear las iglesias.
El actor Pedro Montoya, quien interpretó a Bolívar en la televisión, se creía la reencarnación del héroe.
Para el año de 1815, en Texas, en un lugar tan distante de su tierra natal, ya existía un lugar que llevaba su nombre “Port Bolívar“; la importancia de este hecho geográfico radica, por increíble que parezca, en Venezuela, su Patria que le debe a él su razón de existir, no honrró su nombre hasta 1846, o sea, 16 años después de su muerte, cuando a solicitud de los habitantes de la antigua Angostura se adoptó el nombre de “Ciudad Bolívar”.
En 1963, Estados Unidos se preparan a lanzar la nave insignia del poderío nuclear en el mar, con un submarino de alta tecnología cargado con cohetes nucleares. Tan poderosa arma debía ser bautizada con un nombre a la par de esa potente embarcación. Decenas de nombres fueron presentados para su consideración: dioses mitológicos como “Poseidón”… héroes militares como “Alejandro”… aventureros como “Colón”… científicos como “Benjamín”… héroes norteamericanos como “Washington”; en fin, cientos de nombres fueron sugeridos… sin embargo, un nombre logró el consenso de la armada: SIMÓN BOLÍVAR.
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